¿Recordar o sentir ese recuerdo?

De vuelta a casa contando estrellas... a las 20:30h de la noche en la tercera curva de la carretera saliendo de Pálmaces.

Son muchas las estrellas que puedo llegar a contar, las hay de todos los tamaños pero todas ellas relucen sobre aquel manto negro que cubre este bonito pueblo que tantos recuerdos me produce. Muchos momentos intensos allí vividos que consiguen arrancarme una sonrisa cada vez que pienso en ellos.

Quiero, o mejor, necesito pasar las 24 horas del día con ella, ver los corzos pasearse por el monte, reírnos hasta más no poder de cualquier absurdez (de como cazas moscas con la mano, de como controlo aquella bici sin frenos, de nuestras competiciones para ver quien se mete antes en la piscina ...), que me arregles para las fiestas, que lo demos todo bailando, que hagamos mil y una amigas adonde vayamos (perfectamente sabes que va con segundas), hacernos millones de fotos (yo en la mayoría con la lengua fuera), que me presentes a mucha gente y yo salude con mi timidez característica, hacernos DJs del coche de tus papás, etc. 

Sin embargo no son más que imágenes que pasan desordenadas por mi cabeza. Me enfado. No consigo ordenarlos. Además, ya no recuerdo lo que sentí en ese momento... Se me cae una lágrima y comienzo a pensar:

¿Qué es mejor: recodar el momento o sentir ese recuerdo?

Después de todo el viaje dándole vueltas al asunto, llego a casa y cuando estoy apunto de adentrarme en el fantástico mundo de los sueños encuentro la respuesta:

-  No voy a vivir ningún momento igual así que voy a hacer de cada uno de ellos una experiencia inolvidable y le voy a dejar a la vida que sea ella quien decida si voy a recordar o sentirlos cuando en un futuro vuelva a mirar las estrellas y todos esos recuerdos invadan mi mente una vez más.
MC#